Sofía Plaza
Se trata de una moderna técnica quirúrgica en la que se extrae grasa, a través de pequeñas incisiones en la piel, así se consigue modelar el cuerpo.
La finalidad no es adelgazar sino eliminar los acúmulos de grasa, en su mayoría de origen genético.
Es una intervención que puede parecer sencilla, pero que no lo es tanto porque requiere conocimientos precisos de los tejidos de la piel y una sensibilidad artística. El cirujano debe tener la sensibilidad de Miguel Ángel, aunque sea imposible dejarnos como el David.
Esta operación origina un estímulo que supone el ir mejorando y por el cambio metabólico que ocasiona la disminución de la cantidad de grasa en el organismo. Se hace desaparecer cúmulos de grasa, en ningún caso se debe realizar si hay flacidez o exceso de piel. Origina un cambio, pero no elimina la tendencia a engordar, por lo que es necesario mantener los cuidados en la alimentación, hacer dieta y ejercicio.
La lipoaspiración puede ser realizada en prácticamente todas las partes del cuerpo, desde la cara hasta las piernas y brazos, ya como intervención aislada o como complemento de otras cirugías, principalmente del lifting cérvico-facial y de la abdominoplastia.
Operaciones estéticas 